LOS ÁNGELES -- El armador de Houston Rockets, Pablo Prigioni, volvió a marcharse del Staples Center con una derrota ante Los Angeles Clippers
en la semifinal de la Conferencia Oeste (128-95). Los californianos
toman ventaja en la serie (3-1) y si ganan un partido más pasarían a la
última ronda del Oeste. La superioridad del conjunto dirigido por Doc
Rivers está siendo palpable, sobre todo en los dos últimos encuentros.
El del domingo finalizó con una diferencia de 37 puntos a favor de los
Clippers.
"Las sensaciones son que ellos están siendo muy superiores y que
nosotros no encontramos la manera de jugar. Ahí está la diferencia.
Ahora mismo no hay color entre un equipo y otro", comentó el base.
Los Rockets utilizaron la táctica del 'hack-a-Jordan' (hacer faltas a DeAndre Jordan)
para limitar a sus rivales por la poca efectividad del centro desde la
línea de tiros libres. En esta ocasión la táctica no sirvió a los
tejanos. Cuando el jugador recibió faltas intencionadas, los Clippers
lograron 0.82 puntos por jugada y los Rockets no sacaron provecho de la
situación. De las 17 posesiones en las que el pívot recibió faltas de
los Rockets, el plantel logró tan solo tres puntos más de los 14 tiros
libres que completó Jordan.
"Es lo que decide el cuerpo técnico y nosotros lo hacemos", continuó
Prigioni. "En la primera parte, cuando lo hicimos, estábamos en el
partido. No sé en este punto valorar si funciona o no funciona. Está
claro que no lo podemos mantener todo el partido y haciéndolo no estamos
ganando tampoco el partido porque hemos perdido los dos partidos. Hay
momento puntuales en los que puede ayudar. Ya vimos que contra San
Antonio hubo momentos en los que les ayudó, que te alcance para ganar un
partido o la serie ya es otra cosa", apuntó.
A pesar de errar 20 tiros libres Jordan permaneció en la duela, y es
que su presencia hizo que los suyos fueran mejores. Con él activo, la
diferencia a sido de 19 puntos en la serie, una cifra que el domingo
llegó a las 16 unidades.
Otro de los aspectos que decidió el encuentro fue la pobre actuación de Dwight Howard
(siete puntos y seis rebotes) quien acabó expulsado con dos faltas
técnicas en el último periodo tras jugar 18 minutos. Con él en cancha,
los Clippers alcanzaron 26 puntos más que con Howard en el banquillo.
"Es una serie de playoff dura. Mucho juego físico, tanto él como los
del otro equipo", señaló Prigioni. "Se raspan mucho. Es normal, hay
veces que se producen esos roces. Él juega duro y responde y es lo que
hay. Hay veces en que le juega a su favor y otras que no como el caso de
hoy que salió expulsado".
Los ánimos del jugador iban acordes con el resultado que han logrado
los Rockets en los dos juegos en Los Ángeles, donde además de perder han
mostrado una imagen muy alejada de un campeón de división. Aunque es
consciente de que la serie está complicada, piensa que su equipo jugará
con buena mentalidad y menos presión el martes en el Juego 5, el que
podría significar la clasificación de los Clippers para la final de
conferencia.
"Ahora mismo la cosa está tan negativa que es difícil. Ahora hay que
reflexionar, descansar, volver a casa. La cabeza va trabajando y estará
lista para competir el martes y veremos que ocurre ahí. Ahora se ve todo
negro, pero en dos días vas al partido con menos presión incluso porque
tienes poco que perder después de estar 1-3 en la serie. Juegas en
casa, puedes salir de repente hay que ver qué ocurre ahí. Ahora está
difícil", sentenció Prigioni.
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