Kevin Love, LaMarcus Aldridge and DeAndre Jordan seguramente escucharán ofertas.Que
los playoffs, las Finales y el draft de este año no nublen el potencial
de la próxima agencia libre de la NBA. Varios jugadores interesantes
están en el radar de algunas franquicias que por uno u otro motivo
necesitan sabia nueva en sus plantillas. Ni que decir tiene la urgencia
de Los Angeles Lakers y los Knicks de Nueva York en salir del pozo en el que se encuentran sumidos en la actualidad, u otras como Dallas Mavericks, Houston Rockets o Miami Heat, que ansían volver a estar en la palestra de los favoritos al título.
Habrá movimientos a pesar de que jugadores como LeBron James, Kawhi Leonard, Tim Duncan o Dwyane Wade,
que están en la lista de agentes libres, sean intocables. A
continuación repasaremos los cinco jugadores más codiciados este verano.
Les saldrán novias y dedicarán el verano a escuchar ofertas varias y
todo tipo de halagos y concesiones de franquicias con aspiraciones. En
ellos está el futuro próximo de algunos equipos de la liga.
LaMarcus Aldridge
Sobran las presentaciones para el que junto a Blake Griffin es uno de los ala-pívots más sólidos de la NBA. Versátil, jugador de envergadura, rápido, ágil y el buque insignia de unos Portland Trail Blazers que no llegaron demasiado lejos en la postemporada a pesar de quedar campeones de la División Noroeste.
Aldridge no ha mostrado su opinión sobre si quiere regresar a formar un interesante dueto junto a Damian Lillard.
Los Blazers deberán ofrecerle un proyecto que mejore el actual y que
les coloque entre los planteles con opciones a llegar a lo más alto. Lo
contrario podría significar el adiós de un jugador con ganas de ser
todavía más competitivo. Bien es cierto que la lesión de Wesley Mathews
fue un traspiés, sin embargo no está claro si la situación del equipo en
playoffs hubiera cambiado demasiado.
A la espera de que Duncan decida si continúa en activo, sobra decir que
si lo hace no será en otro lugar distinto a San Antonio, la de Aldridge
podría ser una opción interesante para tomar el relevo en la pintura.
Dallas también podría aprovechar la afinidad del jugador por los equipos
tejanos. Natural de la ciudad y universitario en Austin, quizás uno de
los dos equipos puedan acabar siendo su próximo destino.
Kevin Love
La eterna pregunta de todo jugador es qué prefiere, si ser el actor
secundario de un equipo con opciones a lograr el título o el líder
indiscutible de un plantel sin opciones. A todas luces la segunda opción
no fue la más atractiva cuando el jugador decidió abandonar Minnesota Timberwolves para recalar en unos Cleveland Cavaliers que se han colado en las Finales de la NBA y donde comparte vestuario con LeBron James y Kyrie Irving.
Sin embargo parece que esta opción tampoco le ha seducido y desde el
comienzo de la temporada no se sintió pieza fundamental del esquema de
David Blatt. Le delataron su actitud en determinados momentos y sus
números.
De los 26 puntos, 13 rebotes y cuatro asistencias por cita en
su último años como piedra angular de los T-Wolves, Love pasó a las 16
unidades, 10 rebotes y dos asistencias. Las diferencias en cuanto a su
productividad ofensiva son palpables y hasta lógicas con dos potencias
como James e Irving.
Lesionado del hombro durante la primera ronda de la postemporada, Love
tampoco ha podido sentirse parte del equipo en el camino hacia las
Finales. Además de los deseos del jugador, los Cavs también tendrán
mucho que decir en su futuro. ¿Seguirán confiando en un jugador que
ocupa un espacio salarial de 15.7 millones de dólares (más si vuelve a
fichar por Cleveland)?
Equipos como Los Angeles Lakers están deseando poder seducir a Love.
Marc Gasol
Menuda temporada ha completado el pívot español. Después del fracaso
durante el Mundial celebrado en España el verano pasado y alentado por
su reciente paternidad, Gasol ha tomado impulso durante esta campaña.
Cambió de dieta, perdió peso y ganó en agilidad para protagonizar su
temporada más productiva en la NBA (17 ppj, ocho rpj y cuatro apj).
Al igual que Aldridge, Gasol no ha decidido nada sobre su futuro, o al
menos es lo que nos ha dicho por activa o por pasiva a los reporteros.
Lo que si tiene claro es que a sus 30 años de edad quiere optar a hacer
valer su calidad con un campeonato. Su hermano cuenta con dos anillos y
Marc quiere tener un hueco en la historia al igual que hicieron en el
Juego de las Estrellas este verano.
Si hay un punto a favor de Memphis es que si pulen un poco el proyecto
podrían convencer a un Gasol que también tiene un punto de lealtad. Cabe
la posibilidad de que les dé otra oportunidad y es que la química que
tiene con Zach Randolph
es una de las más letales en la pintura de la NBA. El internacional
español tiene que consultar muchas cosas con su almohada durante este
verano.
DeAndre Jordan
Particularmente lo metería en el grupo de los Duncan, Wade, Leonard y
James, de esos intocables en la agencia libre. Dónde mejor que en Los Angeles Clippers para seguir brillando. Su conexión con Chris Paul
y Blake Griffin es incuestionable. Juegan de memoria y aunque los
angelinos sufren en demasía como conjunto en el apartado de los rebotes,
Jordan es un seguro de vida en ese apartado.
El 'hack-a-Jordan' (hacer faltas intencionados para llevarle a la línea
de tiros libres) le ha funcionado a su equipo en varios compases de la
postemporada y si los Clippers no llegaron a la final de la Conferencia
Oeste fue porque sencillamente el equipo se desinfló cuando más oxígeno
tendría que haber tenido. Veremos cómo afecta a la moral del equipo la
temporada que viene.
Los Clippers le quieren de vuelta y si la lógica se impone Jordan estará
de regreso y planteles como los Mavericks tendrán que esperar.
Jimmy Butler
Se trata de uno de los agentes libres más jugosos. Fue nombrado como el
jugador que más mejoró este año. Su trabajo recibió recompensa y además
de que sus números mejoraron considerablemente (siete puntos más por
partido con respecto al año pasado), ha logrado ser más hábil en varios
aspectos.
Los Chicago Bulls
se han visto fortalecidos gracias a él. Su defensa ha sido clave en
varios momentos y la combinación con sus virtudes ofensivas le han
convertido en un jugador difícil de marcar. Sin duda, merece un máximo
contrato (el año pasado su salario fue de 2.1 millones de dólares). Los
Bulls pueden igualar cualquier oferta que hagan por él al ser agente
libre restringido.
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