MADRID -- Las esperanzas del Real Madrid de seguir peleado por la
Liga son escasas; casi nulas. Pero el conjunto merengue no pude darse el
lujo de bajar los brazos cuando existe la posibilidad de que Barcelona,
con cuatro puntos de ventaja en la tabla, a dos jornadas del final,
tropiece.
Tras la enorme "decepción" de haber sido eliminados en la semifinal
de la Champions League a media semana, el Madrid se ha reducido al
equipo que se encomienda a la desgracia ajena para tener al menos el
consuelo del campeonato de Liga. Consuelo, puesto que desde hacía meses
habían puesto todas sus esperanzas en el trofeo europeo. Pero ahora "la
Champions se ha acabado" para el Madrid que tiene que "reaccionar" y
rápido para, al menos, poder decir que lucharon hasta el final.
"Tenemos que reaccionar después del partido del miércoles. Sé que no
será fácil, pero estos días han entrenado bien y están concentrados.
Vamos a darlo todo en estos dos partidos para seguir luchando hasta que
la matemática nos condene", dijo Carlo Ancelotti, técnico del Real
Madrid, en rueda de prensa tras el entrenamiento de su equipo, el último
de cara al encuentro que disputará este domingo ante el Espanyol.
A la misma hora, Barcelona estará visitando al Atlético de Madrid en
el Vicente Calderón para disputar la penúltima jornada de Liga con miras
a proclamarse campeón si sale vencedor. En ese escenario, no importará
si el Madrid se manda una goleada. Las "matemáticas" lo habrán condenado
antes de enfrentarse a Getafe en la última jornada. Ancelotti, no
obstante, mantiene la fe en que aún le quedan dos partidos de vida. No
quiere pensar más allá de lo que ocurrirá mañana en Cornellà; ya sea el
futuro de sus jugadores o el suyo, que hoy, luce incierto pues en Madrid
se empiezan a vislumbrar cambios llamativos en el conjunto merengue de
cara a la próxima campaña.
"Yo entiendo que hay mucho interés (por su futuro) pero nuestro
escenario es distinto. Tenemos dos partidos y tenemos que hacer lo
máximo. Tenemos no sé cuántas posibilidades pero hay que jugarlo. No
estamos hablando de esto, sino de luchar y pelear. Después hay mucho
tiempo para hablar del futuro del Real Madrid", señaló el técnico.
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