Entre la nostalgia de tiempos mejores vestido de
rojo, cuando llegar a Monza era sinónimo de espejismo o esperanza, según
el año, y la vista puesta en el horizonte donde supone algún día un sol
naciente. Así llega Fernando Alonso al GP de Italia, una carrera en la que ha ganado en dos ocasiones.
“El Gran Premio de Italia es una de mis carreras
favoritas del calendario. Monza es un circuito único y los Tifosi son
unos aficionados muy apasionados, que hacen que la carrera tenga un gran
ambiente. Desafortunadamente, será una carrera complicada para
McLaren-Honda, pero pelearemos duro para conseguir el mejor resultado
posible".
Pelear, luchar, palabras que acompañan a Alonso
desde que en 2006 decidiese dejar Renault para encontrar la maldición de
la escudería equivocada. Pero esa es otra historia. Ahora llegamos a
Monza, un circuito que será complicado de nuevo para su McLaren Honda,
una pista que define así el asturiano: “Monza es absolutamente único, un
circuito fantástico, con muchísima historia, grandes aficionados y
súper divertido para pilotar. Ir a Monza es siempre especial, cada año, y
disfrutar de su ambiente, además de que la forma en que se siente el
coche cuando corres en esa pista es completamente distinta de las
demás”.
Fernando ahora es consciente de que aquellas
victorias quedaron en el olvido, aunque las conserva en un hueco de su
memoria, las logro con los dos equipos más legendarios de la historia de
la F1-1. McLaren 2007, Ferrari 2010. “A lo largo de mi carrera he
ganado dos veces en Monza, una de ellas precisamente con McLaren en
2007, y ambas fueron increíblemente especiales. Para esta carrera
tenemos que gestionar nuestras expectativas, puesto que sabemos que las
características de la pista no le van a ir bien a nuestro coche”,
declara el astur con palabras mezcla de sentimientos.
Alonso es consciente de que volverá a ser una
carrera complicada, así que estos son sus objetivos: “Va a ser duro,
pero aún así empujaremos con fuerza, como de costumbre, aprenderemos
todo lo que se pueda sobre nuestro paquete y trabajaremos en nuestra
configuración de baja carga aerodinámica para intentar sacar el máximo
provecho al fin de semana”. Aprender para el futuro. Eso que hacemos
cada día.
Mientras, su compañero Jenson Button establece
también otras metas, parecidas… “La clave para nosotros estará en
sacarle el máximo posible al coche el sábado, para darnos una opción de
poder librar una buena batalla el domingo por la tarde. Pese a los
problemas, el coche estuvo bien equilibrado en Spa y las sensaciones
eran buenas para pilotar, sobre todo en la clasificación, con lo que
nuestro objetivo será aprovecharlo el máximo también en Monza, antes de
partir rumbo a las carreras fuera de Europa donde habrá circuitos que le
irán mucho mejor a los puntos fuertes de nuestro coche”, sostiene el
británico. Entre la esperanza y la utopia.
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