
N.Y. – Si José Calderón
pudiera poseer los poderes de los magos invitados a entretener los
aficionados durante el descanso del medio tiempo, el español haría
desaparecer las lesiones que obstaculizaron su primera temporada en la
Capital del Mundo.
El armador de los New York Knicks,
que la semana pasada cumplió 34 años de edad, perdió los primeros 13
partidos de la campaña regular debido a una distensión en la pantorrilla
derecha que sufrió durante la pretemporada y luego fue baja en los
últimos 26 encuentros del torneo por causa de dolores en el tendón del
Aquiles de su pierna izquierda.
“Estoy tratando de olvidar lo que pasó y es como que estoy llegando a los Knicks”, aseveró el veterano.
“Así que estoy muy emocionado, estoy de vuelta, y espero que voy a
jugar un gran baloncesto este año y como he dicho, fue difícil”,
continuó el base español, que aproxima su temporada 11 en la mejor liga
de baloncesto del mundo. “Siempre estuvo pasando algo y no pude estar
allí al 100 por ciento. Pero esperemos que nos olvidamos de eso y ahora
es una nueva página”.
Calderón se unió a las filas del conjunto mediado a un canje de
Dallas y cuando se presentó el momento de su debut, los Knicks tenían
foja de 3-10 y prácticamente estaban descartados de la clasificación a
los playoffs.
El base, quien fue uno de los pocos jugadores que no fue consumido
por la complejidad que presentó el sistema del triangulo, apenas
participó en la mitad de una temporada regular, produciendo promedios de
9.1 puntos y 4.7 asistencias en 42 encuentros con el segundo peor
equipo de la NBA.
El extremeño, que de nuevo tendrá la encomienda como el armador
titular de una franquicia que no ha ganado un campeonato desde 1973,
estuvo muy optimista con lo que espera de su escuadra, que se encuentra
en la segunda semana del campamento de entrenamiento. Nueva York inicia
el calendario de pretemporada el miércoles contra el Baura de la liga
brasileña.
“La química se ha estado desarrollando en las ultimas tres semanas,
trabajando juntos con el personal (de entrenadores)”, afirmó Calderón.
Nueva York pasó por una drástica renovación del plantel durante la
temporada muerta, abriéndole las puertas a 13 nuevos jugadores que
trataran de aliviar el sabor desabrió que les brindó la temporada pasada
a aquellos seis que aun permanecen en el equipo.
Los Knicks ficharon varios veteranos, entre ellos un par de pívots, el veterano cubanoamericano Robin Lopez y el pívot francés Kevin Seraphin, y dos escoltas, Arron Afflalo y el esloveno Sasha Vujacic, que ganó un par de anillos como miembro de Los Angeles Lakers bajo el tutelaje de Phil Jackson.
“Creo que trajimos a chicos querían estar aquí. Estábamos buscando el
tipo de chicos que podían encajar con lo que nosotros queremos hacer
como equipo de baloncesto”, dijo Calderón, quien elogió los avances del
letón Kristaps Porzingis, la cuarta selección del sorteo 2015.
“Creo que trajimos jugadores veteranos que saben cómo jugar el
baloncesto. Tenemos chicos que son profesionales y muy trabajadores y
esa fue la clave. Creo que eso es lo que queríamos y creo que por eso
todo el mundo se siente bien acerca de lo que hicimos en el verano”.espn
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