El australiano Ron Clarke, un mito de las carreras de fondo, falleció la pasada madrugada en el hospital Allamanda
(Soutport, Queenland, Australia) como consecuencia de un fallo renal.
Tenía 78 años y al conocer su muerte se le rindió un homenaje en el
parlamento australiano.
A lo largo de su carrera deportiva batió 17 récords mundiales
en las pruebas de dos millas (2), tres millas (4), 5.000 metros (4),
seis millas (2), 10.000 metros (2), diez millas (1), 20 km (1) y la hora
(1).
Los que más repercusión tuvieron son los alcanzados en las pruebas
olímpicas de 5.000 y 10.000 metros. En la primera de ellas, el
australiano llevó la plusmarca de 13:34.8 (1965) a 13:16.6 (1966) y en
la segunda, de 28:15.6 (1963) a 27:39.4 (1965). En este último caso
batió la plusmarca mundial por 36 segundos en una sola carrera.
Sin embrago, competitivamente no consiguió grandes logros y su mayor éxito se limitó a una medalla de bronce en los Juegos de Tokio 1964.
Tras dejar el atletismo fue empresario, defensor del medio ambiente, filántropo y alcalde de Gold Coast durante ocho años.
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