Lamar Odom fue una pieza fundamental en la consecución de los dos últimos anillos logrados por los Lakers (2009 y 2010).
Sin embargo, su vida atraviesa por grandes momentos de dificultad. Sin
jugar desde hace más de un año (tuvo un fugaz paso por el Baskonia en el
curso 2013-14), últimamente es noticia por sus problemas con las drogas (se especula con que ha vuelto a consumir crack) y desestabilidad emocional. No ha levantado cabeza desde su divorcio con la celebrity Khloé Kardashian y, po si fuera poco, en junio de este fallecieron dos de sus mejores amigos.
Así que, viendo este panorama, un excompañero suyo en los Heat, Lakers y Clippers se ha ofrecido voluntario para ayudarle a salir de esta peligrosa dinámica. Se trata de Caron Butler. "Estoy preocupado por él", ha comentado el ahora jugador de los Kings en una entrevista emitida en 'TMZ Hollywood Sports'. Y es que Butler acaba de publicar un libro titulado Tuff Juice, mi viaje desde las calles a la NBA en el que explica cómo logró llegar a jugar en la NBA y convertirse en el devoto cristiano que hoy en día es tras una infancia muy problemática. A
los 11 años ejercía de pequeño traficante de drogas y antes de los 15
años había sido detenido hasta en 15 ocasiones y recluido en diversos
centros de menores. En uno de estos internamientos su vida dio
un vuelco al comenzar a leer versículos de la Biblia y descubrir su
pasión por el baloncesto. Con estos precedentes, dice entender por lo
que está pasando Odom y se ha ofrecido a reconducir su camino.
No sabemos si finalmente lo logrará, pero lo que sí parece seguro es que su historia será llevada al cine de la mano de Mark Wahlberg. "Es una posibilidad. He hablado con él y le encanta mi historia", explica el propio Butler. ¿Y quién le interpretaría en la gran pantalla? El jugador ya tiene a su favorito: Michael B. Jordan ('The Wire'). "Creo que haría un gran trabajo", explica.
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